Año 4. Número 6. Enero - Junio 2016

Artículo

 

Un nuevo rumbo para el posgrado en México: propuesta de un modelo innovador

Mtro. Everardo Blanco Livera

Profesor UCEM

 

 

Resumen 

El artículo plantea la propuesta de un modelo para comprender a los estudios de posgrado en México como un sistema dinámico que atraviesa por distintas fases y etapas de desarrollo, con el fin de facilitar la comprensión y análisis del posgrado y utilizar el modelo como herramienta práctica para el diagnóstico de la fase o etapa específica alcanzada, y de los posteriores estadios pendientes por lograr a partir de la implementación de políticas innovadoras enfocadas en los rubros pertinentes resaltados por la aplicación del modelo.

Palabras clave: Modelo, Sistema de posgrado nacional, Diagnóstico.

 

Abstract 

The article proposes a model to understand the Mexican postgraduate studies as a dynamic system compound by phases and stages, to help the understanding and analysis of this kind of studies, and to use the model for diagnosing the national postgraduate studies identifying the specific stage/ phase achieved and the following to attain by the implementation of innovative policies focused on the pertinent aspects highlighted by the model.

 Key words: Model, National postgraduate studies system, Diagnosis.

 

Conforme avanza el siglo XXI se reconoce la importancia central del conocimiento científico en el desarrollo y consolidación de los Estados nacionales. En este sentido, es que cobra centralidad el nivel académico del posgrado (especialidades, maestrías y doctorados) debido a que es ahí en donde principalmente se detonan procesos de formación de capital humano que posteriormente producirán el conocimiento científico y la innovación, con sus repercusiones favorables en todo el entorno social.

            En el caso de México, para velar por la calidad del posgrado nacional existe el Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNCP), creado en 2007, que es implementado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), entidad del gobierno federal encargada de establecer los lineamientos nacionales en ciencia y tecnología. De conformidad con el CONACYT (2016) el PNPC fomenta la mejora continua y el aseguramiento de la calidad del posgrado nacional; sin embargo, no se hace explícito el modelo concreto detrás de dichas categorías de mejora continua y de calidad, por lo que finalmente el PNPC pareciera quedar en un conjunto de indicadores cualitativos- cuantitativos para valorar el grado de cumplimiento de metas establecidas para cada uno de los niveles específicos que se pueden lograr dentro del Programa, mas no indicadores referenciados en un modelo que permita vislumbrar grados de desarrollo amplios y referenciados a un “deber ser” con visión estratégica de largo plazo del posgrado nacional.

            Por otra parte, desde el ámbito social y académico se han realizado estudios que plantean reflexiones en torno al posgrado nacional, como el elaborado por el Consejo Mexicano del Posgrado, A.C. (COMEPO) en 2003 (Argueta y Martínez, 2003)  que buscó plantear un Plan de Desarrollo del Posgrado Nacional, alineado con el Plan Nacional de Desarrollo vigente y a partir de un diagnóstico (basado principalmente en datos de ponencias de congresos académicos). La parte medular de este esfuerzo fue el plantear lineamientos y acciones concretas por realizar para lograr avances en el posgrado nacional, pero no estableció con claridad razones explicativas respecto del modelo de posgrado que guiaba dicho Plan.

Ahondando en el esfuerzo iniciado en 2003, el mismo COMEPO publicó en 2013 un estudio con base en el levantamiento de datos directamente de las instituciones de educación superior en 8 estados de la República mexicana, en el que se estableció que el problema que enfrentaba el posgrado nacional era la carencia de un presupuesto suficiente y transparente para impulsar y soportar la creación, operación y mejora sostenida de los programas educativos de este nivel (Serna et al, 2013, p. 10). Es decir, que bajo esta afirmación pareciera ser que la problemática del posgrado fuera de índole presupuestal, más no de visión estratégica a largo plazo y/o en términos de falta de articulación de los distintos actores en un sistema nacional del posgrado. De la misma manera, en el estudio de referencia se plantearon algunas afirmaciones relativas a solicitar como obligatorio mayor rigor académico y compromiso en el otorgamiento del Registro de Validez Oficial de Estudio (REVOE) a los programas de posgrado nacionales, y se dio por sentado que el PNPC mide la calidad del posgrado nacional al igualque las evaluación que realiza la FIMPES (Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior) sin reflexionar en torno a si existe un modelo (y de existir cuál es) que guíe dichas evaluaciones y/o registros.

Un par de años más tarde, el COMEPO en colaboración con la Unidad Aguascalientes del Centro de Investigación en Matemáticas, A.C., el Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica, A.C., y la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, decidió dar un paso más en la comprensión de los posgrados nacionales al elaborar un diagnóstico del posgrado a nivel nacional (Bonilla, 2015) a partir de la aplicación de una encuesta a una muestra representativa del total de posgrados existentes en el país, debiendo responder la encuesta los encargados o coordinadores de los programas de posgrado. Con base en la información obtenida, se elaboraron indicadores con valores de 0 a 10 que dan una visión general cuantitativa de los rasgos del posgrado nacional respecto de distintas áreas específicas dentro del posgrado nacional. Asimismo, los indicadores permiten dimensionar rasgos del posgrado a nivel nacional, regional y por entidades federativas.

            Sin embargo, para la realización de este esfuerzo de levantamiento de información nacional no se partió de un Modelo de Desarrollo del Posgrado Nacional ni de vislumbrar al posgrado nacional como un sistema y dilucidar en qué etapa de desarrollo se encontraba dicho sistema (y qué significaba el estar en determinada etapa), por lo que la ausencia de una visión estratégica explicita que se observó en el PNPC y en los estudios previos del propio COMEPO persistió en este último diagnóstico realizado.

 

Hacia un modelo de desarrollo del posgrado nacional

La idea de plantear una propuesta de Modelo surgió ante la ausencia que se percibió en los trabajos académicos, programas nacionales como el PNPC, así como diagnósticos institucionales, respecto de brindar algún esquema general de comprensión del posgrado nacional, dado que únicamente se encontraron abordajes respecto de posgrados específicos (un programa de posgrado), o a lo más de posgrados institucionales en su conjunto, como lo fueron los estudios relacionados con el Instituto Politécnico Nacional (Chávez y Cassigoli, 2000) y con la Universidad Nacional Autónoma de México (1997). En el caso del PNPC, que en efecto se trata de un programa aplicable a nivel nacional, este únicamente se enfoca en especificar estadios que denomina de calidad, con base en indicadores cuantitativos-cualitativos por cumplir de los programas de posgrado para que éstos tengan acceso a recursos públicos adicionales una vez que ingresan a dicho programa. No obstante, no se encontró explícito un modelo guía detrás de los indicadores y propuesta del PNPC que busque articular un sistema de posgrado nacional y/o un “deber ser” estratégico de largo plazo del mismo. Por ello, es que se considera altamente pertinente la elaboración de una propuesta como la que se esboza a manera de propuesta inicial, con el fin de no sólo comenzar a subsanar la carencia observada, sino de abrir la discusión en torno al tópico y de establecer puntos de referencia que permitan coadyuvar en la propia gestión pública del posgrado nacional.

Es importante señalar que a pesar de que se habla de un Modelo que aplique a todo el posgrado nacional no se trata de una visión totalitaria de la educación. No se asume que el Estado intervenga en los contenidos curriculares de cada programa de posgrado dictando específicamente lo que se debe enseñar o no, sino que la propuesta plantea que se requieren alinear a los posgrados del país para que formen recursos humanos especializados que respondan a las necesidades concretas de sus entornos, con el fin de garantizar que dichos recursos humanos efectivamente se incorporen al mercado laboral, con lo cual se estarán detonando círculos virtuosos de generación de personal altamente calificado -consecución de empleos -desarrollo de mejoras e innovación en la industria, gobierno, las propias instituciones de educación superior, así como la sociedad en su conjunto.

De igual manera, el Modelo que se propone desarrollar tampoco implica un sólo tipo de enseñanza o forma específica de realizar posgrado en el país, pero sí hace énfasis en que se requiere una directriz estratégica general de hacia dónde deben encaminarse los esfuerzos de manera articulada si se busca estar a la altura de la sociedad global del conocimiento del siglo XXI.

 

El Modelo

El Modelo de Desarrollo del Posgrado Nacional que se propone está compuesto de tres elementos principales: las Premisas que lo sostienen, las Fases que lo integran, y las Etapas de transición que buscan apoyar en la comprensión del paso dinámico entre Fases, sea en avance o retroceso .A continuación se procede a describir y explicar cada uno de los elementos en el orden mencionado.

 

Premisas

Las premisas son los pilares que sustentan el Modelo explicativo que se plantea, el cual parte de una visión dinámica de la realidad referenciada en los entes biológicos, los cuales pasan por distintas fases de desarrollo desde su surgimiento hasta su declive, rescatándose rasgos característicos clave para cada una de dichas fases. Es importante resaltar que laanalogía con los entes biológicos no es plena, dado que el posgrado nacional no tiene desarrollos con base en el tiempo que sobrevive, sino que independientemente del tiempo que exista puede permanecer en una sola fase de desarrollo, o avanzar rápidamente por distintas fases.

Asimismo, se parte del supuesto de que es importante configurar a las instituciones encargadas de impartir posgrados en un sistema, entendido este como una integración articulada bajo relaciones de interdependencia entre sus miembros, el cual ingresa insumos provenientes de su entorno, los procesa, y emite resultados al mismo entorno Es así, que bajo este modelo el posgrado nacional tendería a encaminarse en conjunto hacia determinados desarrollos, los cuales son importantes describir y analizar.

La analogía con entes biológicos permite vislumbrar al posgrado nacional como un ser vivo, que una vez que nace se puede llegar a estructurar por elementos interdependientes entre sí y que procesan los insumos provenientes de su ambiente para producir resultados. Dichos resultados realimentan al sistema y pueden permitirle adaptarse más apropiadamente conforme los toma en consideración. De esta forma, la propuesta de Modelo no plantea calificaciones o un marcaje al posgrado nacional sino que fundamentalmente busca apoyar en el reconocimiento de las fases de desarrollo por las que puede atravesar, desde la aparición de programas de posgrado pasando por la posterior configuración o surgimiento de sistemas locales-regionales-nacionales de posgrado, y pudiendo llegar al estadio superior de desarrollo: la internacionalización. De esta manera, la comprensión de lafase de desarrollo en que se encuentre el posgrado permitirá reconocer el área o áreas en que deben reforzarse los trabajos a fin de alcanzar avanzar en su proceso de desarrollo dinámico. Asimismo, no se trata de fases y etapas rígidas sino flexibles, que buscan ayudar a encuadrar las características centrales del posgrado nacional.

Comprendidas y desarrolladas las premisas del modelo es que resultará más sencillo su manejo ulterior aplicativo para el análisis del posgrado nacional, y la elaboración de propuestas de políticas públicas en sintonía con el Modelo propuesto. A continuación se sintetizan las premisas básicas:

 

i)    El modelo representa un proceso dinámico y flexible compuesto por cinco Fases de desarrollo que puede presentar el posgrado, buscando así ser un reflejo cercano de la realidad concreta del objeto de estudio.

ii)  El paso entre Fases se lleva a cabo a partir de una Etapa de transición, la cual permite apoyar la comprensión tanto de la permanencia temporal en determinada Fase como el paso a la Fase siguiente o el retroceso a la inmediata anterior. Asimismo, el posgrado no necesariamente transita por todas las etapas, ni lo hace linealmente hacia adelante: puede estacionarse en alguna de ellas sin llegar a las subsecuentes, o inclusive puede retroceder. No obstante, el objetivo es alcanzar la última Fase del proceso de desarrollo y sostenerse en ella.

iii) Las características descriptivas de las Fases y Etapas de transición se refieren al grueso de los programas de posgrado, que pueden delimitarse a nivel regional (entidad federativa y/o región ANUIES) y/o nacionalmente, más no a nivel de un posgrado o programa de posgrado institucional en específico.

iv) El modelo permite plantear Etapas específicas diferenciadas entre lo que sucede en la Etapa nacional, de lo que acontece en las diversas regiones o entidades federativas que lo integran territorialmente, brindando mayor riqueza y complejidad al posible análisis con base en el modelo.

 

 Fases y Etapas de transición

El Modelo que se propone está compuesto por 5 Fases y 4 Etapas de transición que dan muestra del desarrollo que puede presentar el posgrado nacional,  Las 5 Fases son: 1) Nacimiento, 2) Cimentación, 3) Juventud, 4) Madurez, e 5) Internacionalización. Asimismo, por tratarse de un modelo dinámico se agregaron 4 Etapas de transición, las cuales pretenden apoyar la comprensión del avance o retroceso entre Fases: a) Pre-cimentación, b) Pre-juventud, c) Pre-madurez y d) Pre-internacionalización.

            A continuación se describen las características clave de cada Fase y Etapa de transición.

 

FASE 1.- Nacimiento.

Los programas de posgrado cuentan con la infraestructura y recursos mínimos para desempeñar sus actividades, y tienen la normatividad general básica requerida para funcionar, lo cual les permite un desempeño general. Los programas no se encuentran articulados entre sí con otros programas académicos locales, regionales o nacionales de su mismo nivel, ni cuentan con vinculación con los sectores de la sociedad, sino que sus esfuerzos los enfocan centralmente en afianzar su existencia y atraer estudiantes. No cuentan con líneas de investigación claras y en las que se realice efectivamente investigación significativa, por lo que su producción científica es también insignificante. No cuentan con articulación sistémica.

 

Etapa de transición 1. Pre-Cimentación.

Se realiza mayor investigación científica y producción científica (libros, capítulos de libros, artículos científicos) como base de conocimiento para brindar un posgrado que forme con mayores índices de competencias y pertinencia en su entorno.

 

 

FASE 2.- Cimentación.

Se cuenta con líneas de investigación científica que permiten comenzar a realizar de forma continua y sostenida proyectos de investigación básica/ aplicada, inclusive en vinculación con los sectores público y privado, así como la publicación de productos de investigación, lo cual redunda en mejor formación de competencias así como en un aumento en la pertinencia, congruencia y eficacia del posgrado.

 

Etapa de transición 2. Pre-Juventud.

El posgrado tiene niveles de pertinencia, congruencia y eficacia, que le permiten comenzar a responder continuamente a las necesidades de los sectores en los ámbitos local y/o regional, y fortalecer su infraestructura y recursos del posgrado. Además, entre posgrados de una misma localidad- región se comienza a dar vinculación (entendida como intercambios académicos de estudiantes, estancias de investigación de profesores, así como colaboraciones en proyectos de investigación científica y/o publicación de resultados de investigación). Inicio de articulación sistémica.

 

FASE 3.- Juventud.

El posgrado cuenta con la normatividad institucional necesaria para realizar continuamente investigación y producción científicas, lo cual redunda en mayor pertinencia de sus programas así como una firme formación en competencias. La vinculación con los sectores en el ámbito local-regional se mantiene en incremento, llevando a la configuración de redes de colaboración continua. Articulación sistémica local y/o regional.

 

Etapa de transición 3. Pre- madurez.

Se encuentran estructurados esquemas normativos e institucionales formales de vinculación con los distintos sectores para el desarrollo de investigación y producción científica, lo cual permite mejorar la infraestructura y recursos institucionales, así como consolidar la formación de los recursos humanos del posgrado. Articulación sistémica local y regional.

 

FASE 4.- Madurez.

Se encuentra consolidada la normatividad así como la infraestructura y recursos del posgrado, lo cual lleva a un desarrollo consolidado y continuo de investigación y productividad científica. Asimismo, la formación de competencias es esencial en el posgrado, aunado a su pertinencia, congruencia y eficiencia. La vinculación con los sectores es una realidad continua, así como lo es la coordinación entre Instituciones de Educación Superior en el ámbito local, regional y nacional. Proceso de articulación sistémica nacional.

 

Etapa de transición 4. Pre- internacionalización.

Las instituciones se articulan nacionalmente a partir de instancias y políticas que les permiten tener clara su dirección como sistema de posgrado nacional. Lo anterior, da lugar a que se fortalezcan en la investigación y productividad científicas así como en la vinculación con los sectores en los ámbitos local, regional y nacional. La participación en redes y tendencias internacionales es incipiente aún, y no es un patrón de comportamiento del sistema de posgrado. Articulación sistémica nacional.

 

FASE 5.- Internacionalización.

Se cuenta con la normatividad, infraestructura, recursos del posgrado, así como la investigación y productividad científicas a plenitud para formar recursos humanos con las competencias necesarias y acordes a las necesidades nacionales y en concordancia con las tendencias internacionales de las que es parte dicho sistema nacional, por lo que la pertinencia, congruencia y eficiencia del posgrado es plena. Articulación sistémica internacional.

 

Reflexiones finales

A fin de lograr la consolidación del Modelo propuesto como alternativa útil para realizar análisis de los estudios de posgrado en México, y que además sea ventajoso en la reflexión y dirección concreta del posgrado nacional, resulta necesario realizar primeramente avances en su operacionalización en términos metodológicos. En este sentido, uno de los primeros retos por trabajar es el plantear y desarrollar articuladamente indicadores en cada una de las fases y etapas propuestas, los cuales tendrán que estar diseñados de manera que permitan reconocer a partir de qué nivel del indicador se considera alcanzada cada fase/ etapa y en qué nivel no.

            Asimismo, se requiere discutir con mayor profundidad el Modelo a fin de dilucidar a plenitud sus alcances y límites en el desarrollo nacional, que es finalmente el objetivo último del sistema de posgrado propuesto. Aunado a lo anterior, tendrán que realizarse pruebas piloto del Modelo a fin de reconocer en la práctica concreta las aristas por pulir o, de ser necesario, su replanteamiento con mayor profundidad.

            Finalmente, es indispensable el lograr desarrollar paralelamente a la argumentación lógica del Modelo un conjunto de datos empíricos que le den solidez al mismo, lo cual podría realizarse con base en los datos arrojados por el último esfuerzo mencionado de COMEPO en 2015, al ser éste el levantamiento de datos más amplio y a detalle que se haya realizado hasta el momento del posgrado en México.

 

Bibliografía

Arredondo, M. et al. (1997). Transición del modelo académico del posgrado en la UNAM. Estudio de casos sobre las prácticas y procesos de formación. Omnia, 13 (36-37),  101-107.

Bonilla, M. coord. (2015) Diagnóstico del posgrado en México: Nacional. Torreón: COMEPO.

Chávez, F.J., y Cassigoli, I.E. (2000). Hacia un modelo de Posgrado en Educación pública, flexible y a distancia para el Instituto Politécnico Nacional.  Omnia, 16 (40),117-122

Argueta, A. y Martínez, A. coords. (2003). Plan de desarrollo del posgrado nacional. México: COMEPO.

Serna, M. et al coords. (2013). Diagnóstico del posgrado en México: ocho estudios de caso. Morelia: COMEPO.

 

Recursos en línea

Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (2016). Programa Nacional de Posgrados de Calidad. Consultado el 30 de mayo de 2016, en:

http://www.conacyt.mx/index.php/becas-y-posgrados/programa-nacional-de-posgrados-de-calidad

 

Resumen Curricular

Mtro. Everardo Blanco Livera

Licenciado en Relaciones Internacionales y Maestro en Asuntos Políticos y Políticas Públicas por El Colegio de San Luis, A. C. Experiencia en intervenciones organizacionales en la administración pública estatal, y más de 13 años de práctica docente en nivel licenciatura y posgrado. Ha recibido diversas distinciones por su desempeño docente, y cuenta con experiencia en la actualización y diseño de mallas curriculares y programas de estudio de licenciatura y posgrado. Desarrolla investigación científica de manera continua, y expone sus resultados en ponencias y conferencias de eventos académicos nacionales e internacionales, además de contar con publicaciones académicas de su autoría en temas de Ciencia Política, Educación y Migración Internacional.